Nada puede ser más impactante , más envolvente,más efectivo que una buena simbología en medio de una campaña electoral. Son las imágenes fuertes conectores emocionales que te permiten acrecentar en la mente de los electores muchos informaciones y sentimientos.
Los íconos son especialmente vitales en las campañas modernas. Un candidato que no sea reconocido por su Lema o Slogan de campaña o por una seña característica tendrá que esforzarse más en sus apariciones públicas, en el manejo de sus conceptos y en su capacidad oratoria.
Hitler y el nazismo fue experto en el manejo de los recursos visuales, además de la innatas dotes oratorias del líder alemán todos sus actos estaban milimétricamente analizados y decorados, la esvástica ondeante en los cielos eran un llamado permanente a la acción y al sentimiento.
La mano alzada tipo romano le dio, primeramente a Mussolini y posterior a Hitler, otro símbolo característico; los ademanes frenéticos de Nikita Jruschov fueron su carta de presentación al lado de sus verbales desplantes la "V" de la victoria de Richard Nixon, las manos alocadas de un Carlos Andrés Pérez en Venezuela, eran expresiones corporales que le daban a cada quien "personalidad política"
¿Por qué manejar elementos visuales?, por caracterización simple todos los políticos son iguales, se suelen compartir actitudes parecidas con ligeros cambios entre unos y otros, en épocas puntuales los discursos políticos son muy similares casi siempre influenciados por la realidad del entorno, por ende, tienes que buscar algo que te separe del montón.
Los políticos pueden adoptar una simbología a utilizar en banderas, escudos, camisas, propaganda que será su estandarte de campaña y de guerra electoral, o emplear cualquier característica física como la barba que a Fidel Castro lo ha acompañado por años, el bigote "mocho" de Hitler o las orejas del maestro Prieto Figueroa en Venezuela.
Puedes envolverte en algún objeto como la pipa de Don Rómulo Betancourt, el cabello "engominado", como se le llamaba en esos tiempos del Dr Rafael Caldera, o un tipo determinado de vestimenta, cualquier cosa sirve, lo importante es emplearlo y hacerlo cotidianamente.
Los símbolos permiten unificar a todos tus seguidores, te permiten que tus aliados se sientan parte de un sentimiento global, compartido, permanente; los símbolos suelen ser ingredientes esenciales en la construcción de una comunidad política-electoral que piensa igual, que busca lo mismo y que aspira cosas de forma individual y colectiva.
El líder debe saber qué impacto tienen entre sus seguidores esos elementos y aprender a usarlos de la manera más efectiva posible.
Una bandera ondeante, una canción que repite sin cesar alguna frase, una imagen determinada del candidato, todas estas cosas hacen que el candidato se posiciones más rápidamente en la mente de sus electores, que los conozcan más y que sus argumentos tengan identificación visual entre sus públicos metas.
Te pregunto ¿qué es lo que viene a la mente a tus electores cuando piensan en ti? ¿Cuál es el elemento que te distingue de los demás?, ¿Qué detalle te hace particular, único?, ¿Eres simplemente igual a los demás candidatos, se ser así por qué ha de votarte y no al otro aspirante?
Al responder estas interrogantes descubrirás la importancia de los elementos visuales de la campaña, te develará el rol que juega en el proceso comicial y te invitará a descubrir en ti qué te hace diferente o a buscar un símbolo que te facilite la labor de distanciarte del común